Entrenar a tu hijo pequeño para usar el baño es una señal de que está creciendo, así que prepárate para afrontar este nuevo capítulo de su vida y echarles una mano.
Los niños pequeños son conocidos por sus rabietas, por lo que sabemos que enseñarles a usar el retrete no es una tarea sencilla. Te recomendamos seguir nuestros consejos para hacerlo un poco más fácil.
Tips para dejar el pañal
¿Está tu hijo cerca de dejar de usar pañales? Entre los 18 y los 24 meses, la mayoría de los niños son capaces de saber cuando tienen que “ir”, así que éste es el momento para enseñarles como niños a ir al baño, aquí vamos…
Antes de empezar, asegúrate de que tu hijo está familiarizado con el retrete, explícale que es y cómo debe usarlo. Puede valer la pena mencionarle que sus compañeros, así como sus personajes favoritos de los cuentos o de la tele, también lo usan, para que sepa que es una parte normal de la vida.
Si usas un orinal, mantenlo siempre en el mismo sitio para que el niño sepa dónde encontrarlo en caso de una emergencia. Los viajes al baño en el último minuto son comunes en estas primeras fases, así que prepárate para una que otra carrera loca. Dejar el orinal cerca del retrete en el baño para niños también es una buena idea, incluso puedes intentar ir al mismo tiempo.
Invéntate o apréndete una canción que tú y tu hijo puedan cantar cada vez que vayan al baño. También puedes aprenderte una segunda canción de celebración, para cantarla cuando hayan terminado. Si esto no funciona, un orinal que venga con música que suene cuando tu hijo se siente es otra opción, mantener en el baño al niño entretenido es la clave.
¡No más pañales! Asegúrate de que tu hijo use ropa interior en lugar de pañales cuando lo estés enseñando a usar el baño. También puedes dejar que el niño escoja su propia ropa interior, su favorita será aquella con personajes infantiles, ya que no querrán mojar a Peppa Pig o a el bombero Sam.
Lo más importante es enfocarse en los logros en lugar de en los accidentes. Este es un gran paso para tu hijo, así que ¡dale todos los ánimos que necesita!
La rutina mañanera del baño para niños pequeños
Establece una rutina. Los niños se frustrarán si tienen que interrumpir su hora de juegos para ir al baño, pero si los llevas al mismo baño a la misma hora todos los días, se irán familiarizando y alegrando con la rutina. Aunque no siempre sea posible, intenta mantenerla aunque estés fuera de casa.
Si tu hijo se suele levantar con hambre, empieza la rutina de aseo después del desayuno. Una vez que tenga la barriguita llena, el niño estará listo para visitar el baño.
Siempre asegúrate que el cuarto de baño para niños esté lo suficientemente caliente para quitarse la ropa y que tienes todo lo que necesitas por adelantado, incluyendo ropa limpia para ponerse después.
Es una buena idea invertir en un escalón portátil para que tu hijo pueda alcanzar el grifo y las toallas por si mismo, aunque mantente atento para que no se vaya a resbalar.
Haz que el cepillar los dientes de tu hijo se haga en un suspiro
¿Estás constantemente persiguiendo a tu hijo alrededor de la casa en un intento de alcanzarle para limpiar sus dientes? Tratar de mantener la atención de tu hijo sólo por unos minutos puede ser complicado, pero hay maneras de conseguir que el momento de cepillarse los dientes sea divertido…
Puedes encontrar cepillos de dientes con diseños guapos, algunos incluso tienen música incorporada, así que deja que tu hijo elija el suyo. Cambiar el cepillo de dientes cada pocos meses, además de ser higiénico, ayudará a mantener su interés.
Si decides comprar un cepillo de dientes musical, canta con la música mientras se cepillan los dientes, o también puedes crear tu propia canción relacionada con esta actividad. Si tu hijo cierra la boca deja de cantar, y vuelve a comenzar cuando continúe cepillándose los dientes. Se acostumbrará a mantener la boca abierta para escuchar la canción.
La hora del baño para niños
Intenta bañar a tu hijo a la misma hora todas las noches, ya que de esta manera lo estará esperando igual que la hora de lavarse los dientes. Instala una barandilla de tal manera que el niño pueda entrar y salir de la bañera sin dificultades. Pueden agarrarse para entrar y les ayudará a levantarse para salir sin resbalar o deslizarse.
Las bañeras que mantienen el calor por más tiempo son ideales para los niños pequeños que disfrutan del baño, ya que el agua se mantendrá caliente por más tiempo mientras juegan y chapotean. También hay bañeras diseñadas para niños pequeños o personas con movilidad reducida. Pero si tu hijo prefiere darse una ducha, puedes intentar instalar una silla de ducha para que se pueda sentar de manera segura y confortable mientras se asea.
Si a tu hijo no le gusta la hora del baño intenta incorporar otras actividades que le gusten. Para darte algunas ideas, mira en el blog de nuestro experto ocho maneras de disminuir el estrés a la hora del baño.
Lo más probable es que haya alguna pataleta antes de que las nuevas rutinas sean exitosas, pero sigue con ellas y diviértete ¡La práctica hace al maestro!